jueves, 25 de noviembre de 2010

Un poco de insecticida, por favor

¿Qué hay dentro de la mente de Zapatero? ¿Cuál es el género de Falete? ¿De qué planeta procede Karmele Marchante? ¿Por qué fingen los luchadores de wrestling? ¿En qué trabaja la Familia Real? ¿A qué miran los moáis? ¿Qué consume Karlos Arguiñano antes de salir ante las cámaras? ¿Con qué se tiñe Mariano Rajoy?¿Por qué todo el mundo desvía la mirada dentro de un ascensor? ¿Dónde diantres está la Atlántida? ¿Cómo se puede uno librar de los teleoperadores? ¿Es Belén Esteban la primera oleada de una invasión extraterrestre? ¿El jeta nace o se hace? ¿Se quedan sin saliva los lameculos? ¿Induce al suicidio escuchar la música de Álex Ubago? ¿Cuánta vida hay en el suelo de un váter público?¿Quién me ha robado el mes de abril?...Todas ellas son inquietantes cuestiones que flotan en el inconsciente colectivo de los españoles desde hace tiempo. Yo tengo otra: ¿Por qué se sigue emitiendo "El hormiguero"?

El programa de Cuatro (neuronas), cuyo nombre va de perlas para reflejar la altura física e intelectual de su responsable, ha sido recientemente objeto de una curiosa polémica a propósito de la entrevista perpetrada contra los protagonistas del, por cierto, interesante film "La red social"; una escena en la que el más cretino de todos los hobbits, también conocido como Pablo Motos, volvió a demostrar que la estupidez suele ir acompañada de una absoluta falta de complejos

Dejando a un lado la posterior y exagerada reacción de Jesse Eisenberg, lo cierto es que razones no le faltan para abjurar de su paso por un espacio televisivo en la que el menguado engendro barbilampiño y su patulea de colaboradores se dedican al curioso cometido de hacer el idiota, cuando no simplemente a actuar como perfectos bobos de baba. Quizás a Motos y sus colegas se les ha pasado por alto que "ir de graciosos" es algo muy distinto a "ser graciosos". ¿Por qué? Porque la gracia requiere inteligencia y un mínimo de preparación, virtudes ambas que brillan por su ausencia en  el interior de "El hormiguero", será porque no caben o porque la vanidad no combina muy bien con el talento y de aquella  "Pocket Motos" va sobrado. 

Una cosa es querer hacer un programa original, desenfadado y con el (buen) humor como base y otra muy diferente realizar un programa cuyo guión parece escrito por un politoxicómano de cinco años; los colaboradores, abducidos de un botellón; y las entrevistas a los invitados, preparadas cinco minutos antes en el inodoro. Cualidades todas ellas que hacen de "El hormiguero" un estupendo candidato a engrosar la lista de programas sépticos como "Chulos, putas y viceversa", "Sálvame de Belén Esteban", "Las chonis de la corona", "La noria de las vanidades", "Enemigos íntimos de la vergüenza", "Supervivientes (por desgracia)", "Mercedes Milá Show", "Resistiré este horror","Dónde estás carroña", "El diario de la chony","El intermedio de la nada", "Vuélveme boba"...

La culpa de esto no la tiene Motos, que ya era así antes de "El hormiguero", sino quien mantiene en emisión un programa de vergüenza ajena cuyo público objetivo, a juzgar por la calidad de  sus contenidos, debe ser o bien los inquilinos de un jardín de infancia o bien los habitantes de un frenopático, con todos los respetos para unos y otros.

En definitiva: ruego encarecidamente que alguien extermine televisivamente a los memos de "El hormiguero", aunque sólo sea para evitar que los extranjeros que acudan a él salgan con la idea de que España es un país de gilipollas.

3 comentarios:

Juan Antonio HERGUERA TORRES dijo...

¡Venga, venga, que van a llover ondonadas de ostias!

1.- Al Pablo Motos y su panda: ¡a la mierda! No los soporto y tengo (repito:tengo) que verlos todas las noches. Aunque tal vez haya suerte y a partir de ahora tendré que ver a Wyoming [¿Suerte? Madreee...]

2.- Eisenberg, muchacho semi-analfabeto con apellido de marca de cerveza: ¡culturízate, niñato! Los que ayudaron a otros con barcos fuimos nosotros a vosotros; con la Pinta, la Niña y la Madre que os parió a todos.
[Puestos a decir paridas...]

3.- El tal Conan, no el bárbaro, sino el analfabeto pelota. Vaya mierda de programa también el tuyo que se basa en hacer la pelota al entrevistado y no corregirle nunca. O eso, o tampoco sabes que EE.UU. no ayudó una mierda a España en la Segunda Guerra Mundial; es más, se alió con Rusia, Reino Unido y el resto de países "civilizados" para bajarse los pantalones ante Paquito y proporcionarnos 40 años de paz, gloria y ostias como panes.

La ostia prostituta... ¿y estos son muchimillonarios y guían masas? ¡Un bazuca, por favor!

Ufff.. qué augusto me he quedao, tú... :)

Javi Crespo dijo...

Ooolé. Sí que te has quedado a gusto, sí. Ja,ja,ja :)Tienes razón.

Juan Antonio HERGUERA TORRES dijo...

Un par de aclaraciones, que... en fin.

Aunque la RAE recoge la palabra ostia... lo que quería decir era hostia... egnorante que es uno :(

Y, luego... no, no ha habido "suerte" y sigo teniendo que ver "El basurero" (digo, Hormiguero).
Sé la ví!